07 junio 2006

El Segundo Debate: Dos Golpes Psicológicos

Precisamente un día antes de llevarse a cabo el segundo debate presidencial (celebrado el 6 de junio del 2006), se estuvo anunciando a través de rumores canalizados a varios medios que serían revelados a cadena nacional unos videos del empresario argentino Carlos Ahumada Kurtz -el mismo que videograbó al político perredista René Bejarano al momento de estar recibiendo y estar guardando varios fajos de billetes en un maletín, videos cuyo blanco directo no era realmente René Bejarano sino el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, cuando éste último llevaba entonces una envidiable delantera en las encuestas como pre-candidato de la izquierda para la Presidencia de México-. Los rumores afirmaron que los nuevos videos aún no hechos públicos implicarían a importantes funcionarios del gobierno de la Ciudad de México, funcionarios emanados del mismo partido político al cual pertenece López Obrador.

Hay pocas dudas de que estos rumores espectaculares sobre la transmisión de los nuevos videos a cadena nacional, aunque no tuvieran algo realmente nuevo que aportar si realmente existían, fueron hechos precisamente antes del segundo debate como arma psicológica para hacer titubear al candidato del PRD López Obrador durante el debate, preocupándolo de antemano por algo por lo que posiblemente no tenía razón alguna para preocuparse, proporcionándole con ello una ventaja estratégica y propagandística en el debate al candidato oficial del partido en el poder, Felipe Calderón. Lo que más llama la atención es que no se trataría de videos tomados hace una semana, hace un mes, o hace un año. En todo caso, se trataría de videos con imágenes tomadas con más de dos años de antiguedad, los cuales habrían sido guardados celosamente bajo siete llaves para una ocasión como esta, precisamente cuando la misma Presidencia de México es la que está en juego.

Ya se tenía conocimiento previo sobre la existencia de algunos otros videos que aún no habían sido revelados, mucho antes de que se empezaran a filtrar los rumores de que estos "otros" videos serían lanzados dentro del contexto de una campaña política oficial montada en contra de López Obrador. Se sabía de ellos porque cuando Carlos Ahumada huyó a la isla de Cuba, él mismo reveló a las autoridades cubanas la existencia de tales materiales. De cualquier modo, cuando Miguel Ahumada estaba en Cuba aislado convenientemente del mundo exterior mientras las autoridades cubanas decidían qué hacer con él, el gobierno federal foxista confiaba en que Carlos Ahumada sería protegido con un largísimo proceso de extradición hacia México que ciertamente la Procuraduría General de la República no hubiera tenido mucha prisa en acelerar. Hay que recordar que la crisis diplómatica entre el gobierno de México y el gobierno de Cuba se dió precisamente porque Cuba decidió simplemente deportar por la vía rápida a Carlos Ahumada a México el 28 de abril del 2004 en vez de beneficiarlo con un largo proceso de extradición mientras se decidían las elecciones presidenciales en México. En pocas palabras, porque Cuba no quiso prestarse al juego de la administración federal panista que confiaba en un largo y burocrático proceso de extradición mientras se seguía dañando políticamente a López Obrador en México, porque Cuba haciendo uso de su soberanía y autonomía como país independiente decidió deportar a Carlos Ahumada en vez de extraditarlo, las relaciones entre Cuba y México llegaron prácticamente al borde de una ruptura casi total.

Es importante recordar que antes de hacer efectiva la entrega de Carlos Ahumada a México, la Cancillería cubana reveló que Ahumada había declarado que la difusión de los videos difundidos en México había sido una acción "calculada deliberadamente", lo que dá plena credibilidad a la hipótesis de que ya desde entonces se estaba fraguando un complot contra López Obrador para impedirle llegar a la Presidencia de México, para impedirle sacar a la ultraderecha del poder y a todos los agentes del Yunque injertados e incrustados en las altas esferas del gobierno federal. En un comunicado oficial, el gobierno de Cuba dejó en claro que "La investigación realizada en Cuba demuestra que los hechos relacionados con el señor Ahumada Kurtz y el escándalo público desatado en torno a ellos tienen una incuestionable connotación política". Pese a esto, los vocingleros de la extrema derecha no han cesado de mofarse cada vez que pueden de las denuncias de López Obrador acerca de la existencia de un complot en su contra; aunque como lo prueban las revelaciones hechas libremente por el mismo Carlos Ahumada al gobierno de Cuba hasta el día en que fue deportado a México, el complot es algo real, no es una invención ni de López Obrador ni de las autoridades cubanas, la confirmación saliendo de boca de uno de los principales arietes usados por Vicente Fox y el Yunque en contra de López Obrador, el empresario Carlos Ahumada. No se sabe aún qué podrían haberle ofrecido a Carlos Ahumada a cambio de su colaboración para intentar destruír a López Obrador. ¿Beneficiarle sus empresas con jugosos contratos del gobierno federal? ¿Cubrirlo con un manto de protección para permitirle seguir operando con impunidad? Carlos Ahumada desde un principio se ha justificado alegando que se vió orillado a videograbar a los funcionarios capitalinos porque estaba siendo extorsionado. Pero nunca ha dicho las razones por las cuales supuestamente estaba siendo extorsionado.

A partir del día en que Carlos Ahumada fue deportado de Cuba hacia México se desataron reacciones inesperadas que llevarían a un desesperado y furibundo Vicente Fox a enfrentarse en contra del gobierno cubano usando para ello los servicios de su "delfín" favorito para sucederlo en la Presidencia de México, Santiago Creel, y al llegar a México Ahumada en vez de ser entregado directamente al Procurador del Distrito Federal Bernardo Bátiz como era la obligación de la PGR (puesto que la PGR no le había fincado cargos de ningún tipo a Carlos Ahumada, no tenía atribuciones legales para retenerlo en sus manos sin causa justificada), la Procuraduría General de la República de cualquier modo mantuvo a Carlos Ahumada completamente aislado por espacio de cinco horas sin que nadie de la Procuraduría capitalina lo pudiera ver en todo ese tiempo. En el tiempo en que Carlos Ahumada estuvo custodiado por la PGR con el peregrino pretexto de que le estarían haciendo algunas "revisiones médicas", no se permitió la presencia de ningún testigo u observador de la Procuraduría de la Ciudad de México. Los arreglos secretos que Carlos Ahumada pudiera haber realizado con altos funcionarios de la PGR en esas cinco horas solo lo pueden saber el mismo Ahumada y los representantes de la administración foxista con los cuales estuvo conversando en privado, aunque se dá por hecho que fue en estas cinco horas críticas cuando Carlos Ahumada le pudo haber confirmado algo a la Procuraduría General de la República sobre la existencia de otros videos que aún no habían sido divulgados. No hay duda alguna de que Carlos Ahumada, en esas cinco horas que estuvo en manos de la PGR, siempre supo que estaba entre gente "amiga" que no tomaría acción legal en contra suya, por depender la PGR de un Presidente cuyos intereses en contra del Jefe de Gobierno del Distrito Federal López Obrador coincidían totalmente con los intereses del propio empresario argentino Carlos Ahumada. Después de todo, ¿no había tendido ya exitosamente la misma FEPADE (Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales) de la PGR un manto protector hacia los "Amigos de Fox" para que ninguno de ellos pisara jamás la cárcel?

La amenaza de presentar nuevos videos en realidad no es más que una extensión prolongada del golpeteo intenso a que fué sometido el gobierno del Distrito Federal hace más de dos años cuando los primeros videos fueron filtrados anónimamente a los medios de comunicación. En una nota publicada por EL UNIVERSAL el mismo día en que se llevaría a cabo el segundo debate, se reproduce un intercambio de palabras que tuvo lugar entre la ex-perredista y ex-Jefa de Gobierno del Distrito Federal Rosario Robles (antecesora en el mismo puesto a López Obrador) Rosario Robles y Carlos Ahumada. La conversación se realizó presuntamente de un teléfono de la casa particular de Rosario Robles a un teléfono celular que Ahumada tiene en el Reclusorio Norte en donde está preso y sujeto a proceso penal, conversación en donde ambos hablaron sobre los videos en los que presuntamente se exhibe a Horacio Duarte, representante del PRD ante el IFE, y a Renato Sales, subprocurador capitalino. Y ambos coincidieron en que los nuevos videos no tienen imágenes ni información tan contundentes como el material en el que se involucró a René Bejarano hace dos años, aunque fueron equiparados con las imágenes en las que el ex delegado de Tlalpan, Carlos Ímaz, recibió dinero de Ahumada. En las pláticas, Ahumada le preguntó a Robles si le había mostrado al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, una carta que ambos habrían redactado, a lo cual Robles le contestó que sólo se la había leído sin dejarle copia. (En la carta, Ahumada trata su situación jurídica explicando los motivos por los que pedía un trato carcelario distinto, preferencial, advirtiendo que de lo contrario daría a conocer "todo". Esto apoya la tesis de que Ahumada estaba aprovechándose de la situación para extorsionar al gobierno capitalino obteniendo privilegios y concesiones a cambio de reservarse la divulgación de los "otros" videos.) De cualquier modo, la presentación de una nueva ronda de videos precisamente en el día del segundo debate tendría como verdadero y único fin el golpear políticamente a López Obrador justo antes de las elecciones presidenciales, y de esto quedan pocas dudas al escuchar las grabaciones presentadas por EL UNIVERSAL.

Del 28 de abril del 2004 (fecha en la que fue deportado Carlos Ahumada de Cuba a México) al 6 de junio del 2006 (fecha en la que los otros videos que se había estado reservando Carlos Ahumada supuestamente serían radiados a cadena nacional con todos los gastos de promoción generosamente pagados por alguien justo antes del segundo debate presidencial con el fin de darle un golpe bajo a López Obrador inflando artificialmente al candidato de la ultraderecha Felipe Calderón) transcurrieron unos 25 meses, poco más de dos años. Es mucho tiempo. Es mucho esperar. Pero para los asesores Yunquistas de Felipe Calderón que han estado fraguando todo tipo de tácticas sucias y golpes bajos en contra del único hombre que posiblemente pueda expulsar a la Organización Nacional del Yunque del poder, esos dos años serían tiempo que ha valido la pena esperar. Después de todo, les tomó varias décadas infiltrarse en la política mexicana para poder instalarse en el poder, y pueden esperar pacientemente varios años para llevar a cabo alguna otra maniobra si creen que la larga espera les podrá redituar dividendos con el fin de seguirse afianzando a través de la silla presidencial.

Sin embargo, llegado el tan anunciado día en que se darían a conocer los supuestos videos, ocurrió un incidente de toque novelesco que le daría un poquito de dramatismo al asunto. Se anunció un atentado en contra de la vida de la esposa de Carlos Ahumada, Cecilia Gurza, la poseedora de los "otros" videos. Desde un principio, el asunto del atentado despertó fuertes sospechas entre funcionarios de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal por la sencilla razón de que el atentado consistió en realizar unos cuantos disparos con una pistola de mano en contra del vehículo en el cual la esposa de Carlos Ahumada se estaba trasladando fuera de su casa. Pero el vehículo era un vehículo blindado. Ningún sicario sería tan estúpido como para exponerse innecesariamente en un atentado disparándole unas cuantas balas a un vehículo blindado. En todo caso, si realmente se hubiera querido atentar en contra de la vida de la esposa de Carlos Ahumada, el atentado se habría llevado a cabo antes de que Cecilia Gurtz hubiera tenido oportunidad de subir al vehículo. De hecho, hubo dos oportunidades para tratar de consumar un atentado: antes de que se subiera al vehículo blindado, y después de bajar del vehículo blindado. Pero no pasó la cosa del susto. Y aunque el presunto atentado en contra de la vida de la esposa de Carlos Ahumada no tuvo como consecuencias inmediatas ni siquiera un rasguño para la presunta víctima, fue utilizado de inmediato por ella como pretexto para no divulgar los "otros" videos antes del programado segundo debate entre los candidatos presidenciales, reforzando las sospechas de que esos videos no contenían ningún material tan incriminatorio como aquellos videos filtrados a la prensa años atrás, y despertando sospechas de que la muy anunciada divulgación de los nuevos videos en realidad solo estaba siendo utilizada como arma psicológica terrible en contra de Andrés Manuel López Obrador poco antes de llevarse a cabo el segundo debate, con el deliberado propósito de ponerlo nervioso haciéndolo susceptible de cometer errores y equivocaciones en tan importante foro de proyección nacional. Si realmente todo, incluyendo el presunto atentado en contra de la vida de la esposa de Carlos Ahumada, fue parte de un plan orquestado desde un principio con mucho tiempo de anticipación, esto confirmaría la extensión y la complejidad de los extremos a los que están dispuestos a llegar los nuevos conspiradores que no quieren por ningún motivo perder el poder y mucho menos exponerse a ser investigados a fondo.

Sobre la posibilidad de un autoatentado usado como pretexto para seguir ocultando los "otros" videos, el editorialista Sergio Sarmiento, en su columna "Jaque Mate", hace los siguientes comentarios bajo el encabezado "¿Autoatentado?":

"La desconfianza ante Ahumada es natural. Se trata de un hombre que corrompió a políticos y funcionarios para obtener contratos de construcción y defender sus intereses económicos, y que los grabó para utilizar los videos como instrumentos de extorsión. Mientras escribo este artículo se ha anunciado la decisión de la señora Gurza de no dar a conocer los famosos videos. Esto, que ella afirma es consecuencia del temor de que su familia sufra otro ataque, no hace sino fortalecer la hipótesis de que el atentado no es real. El ataque súbitamente se convierte en una conveniente excusa para no mostrar unos videos que al parecer distan de ser tan contundentes como los que se exhibieron originalmente y que fueron la razón de la caída política de René Bejarano y Carlos Imaz. Las contradicciones en que han incurrido el chofer del vehículo y la señora Gurza generan también suspicacias. Es verdad que quienquiera que ha sufrido un ataque con armas de fuego sabe lo difícil que es recordar los detalles con precisión. Pero no saber si los disparos vinieron de un auto, una camioneta o un peatón levanta suspicacias. Por otra parte, Ahumada debe ya dejar de especular con los videos. Que los presente y si de ellos surge alguna responsabilidad penal o política, que caiga quien caiga."

No es posible cuantificar en forma precisa si el amago de revelar nuevos videos de contenido desconocido, si la sombra de esa espada de Damocles colgando encima de López Obrador a lo largo del segundo debate, le haya impedido a López Obrador estar a su máximo potencial para enfrentarse exitosamente en contra de Felipe Calderón. Pero de que esa fue la intención al anunciar la divulgación pública de tales materiales precisamente en unas horas previas a la celebración del debate, no queda duda alguna. No se trató de una simple y extraordinaria coincidencia, fue el fruto de un golpe bien preparado y dirigido con bastante tiempo de anticipación.

La pretendida revelación de nuevos y comprometedores videos no es la única argucia de carácter psicológico planeada y usada en contra de López Obrador el mismo día del segundo debate presidencial. Inmediatamente después del debate, en un foro de discusión de Televisión Azteca conducido por el conocido comentarista Javier Alatorre, la coordinadora de campaña de Felipe Calderón, Josefina Vázquez Mota, hizo pública una encuesta Internet de REFORMA según la cual el que llevaba la delantera en el debate sobre todos los demás candidatos presidenciales era Felipe Calderón, y el que estaba por debajo de todos los demás candidatos presidenciales era precisamente López Obrador. Una maniobra con el obvio propósito de hacerle creer a todos en el triunfo absoluto de Felipe Calderón desmoralizando psicológicamente al mismo tiempo a los simpatizantes de López Obrador quien fue colocado hasta el fondo de las preferencias de esa encuesta Internet. Pero quien sabe muy bien como se llevan a cabo estas encuestas Internet se dá cuenta de inmediato de lo burdo de la maniobra. En estas "encuestas" cualquiera desde el anonimato sentado frente a una computadora puede votar cuantas veces quiera inflando las cifras a su antojo. La misma persona puede "votar" diez, cien, mil veces, las que quiera, por un mismo candidato, con solo oprimir repetidamente el mouse de su computadora, creando así un mundo artificial de fantasía a su antojo. Y no es la primera vez que los asesores de extrema derecha de Felipe Calderón recurren a este tipo de mentiras con apariencia de verdad. El viernes 24 de febrero apareció un desplegado a plana completa en los principales periódicos de Chihuahua que le daba a Felipe Calderón una amplia ventaja (¡de más de dos a uno!) sobre su contrincante más cercano (López Obrador), y una ventaja sobre el candidato priista Roberto Madrazo con un margen de 4 a 1. El desplegado decía "LAS ENCUESTAS LO DEMUESTRAN: EL PAN Y FELIPE CALDERON A LA CABEZA", citando como fuente de información al Diario de Chihuahua. Los datos citados son los siguientes:

PAN 52%
PRD 20%
PRI 16%

Este triunfalista desplegado tomó por sorpresa a muchos, porque no habían transcurrido cuatro días desde que el periódico REFORMA le había dado una ventaja a López Obrador de un 7 por ciento sobre Felipe Calderón, situando a éste último en un empate técnico con Roberto Madrazo, mismas estadísticas que fueron confirmadas el mismo día por Consulta Mitofsky a través del noticiero de Televisa con Joaquín López-Dóriga. Entonces ... ¿qué sucedió? Lo podemos saber consultando el prestigiado periódico norteño EL DIARIO. El mismo día que apareció este grandioso desplegado triunfalista de Felipe Calderón en los periódicos chihuahuenses, apareció en la contrapágina una aclaración que decía lo siguiente (EL DIARIO, 24 de mayo del 2006):

"Aclaración de El Diario de Chihuahua: Respecto a un desplegado del Partido Acción Nacional que aparece en varios medios de comunicación, en el cual se hace referencia a los resultados de una consulta de preferencias electorales y cita como fuente a El Diario de Chihuahua, es necesario precisar que los datos ahí publicados se derivan de un sondeo de opinión de una página en internet y no fueron obtenidos de la aplicación de una encuesta con todo el rigor científico y metodológico. El Diario es consciente de que las encuestas de preferencias electorales deben ser diseñadas de acuerdo al universo que se quiere consultar y la muestra debe ser representativa de una población determinada, lo cual no se cumple en el caso de cualquier sondeo 'on line', ya que los usuarios pueden modificar deliberadamente los resultados al no haber un control de la muestra."

En pocas palabras, los datos fueron sacados de una encuesta Internet en donde, como ya se dijo, cualquiera desde el anonimato puede votar cuantas veces que quiera inflando las cifras a su antojo. Este mundo de fantasía en el cual se pretende ignorar la cruda realidad maquillando o distorsionando las cifras no es muy diferente a lo que ha estado haciendo la misma maquinaria oficial del gobierno federal panista. Es la misma ilusión pregonada por Joseph Goebbels, el ministro de propaganda de Hitler, según la cual una misma mentira repetida miles de veces llega a ser aceptada como una indiscutible realidad.

Para que la "encuesta" Internet de REFORMA citada por Josefina Vázquez Mota pudiera colocar a Felipe Calderón en el primer lugar y a López Obrador en el último, con todos los demás candidatos ocupando lugares intermedios en la susodicha "encuesta", se hubo de requerir un pequeño ejército de personas sentadas cada una frente a una computadora conectada a Internet, votando en rondas repetitivas de proporciones fijas; por ejemplo, cada persona "votando" diez veces por Felipe Calderón, "votando" después ocho veces por Roberto Campa, y así sucesivamente, hasta votar una sola vez por López Obrador, y tras esta ronda volver a comenzar con otra ronda repitiendo la misma proporción de "votos" emitidos y vueltos a emitir, sepultando paulatinamente de este modo con la manipulación de cifras infladas los "votos" emitidos por los demás internautas que honestamente votaron una sola vez sin pretender votar varias veces para inflar artificialmente al candidato de sus preferencias. Esto no es más que la versión cibernética de los "tacos de votos" contra los cuales tanto protestó el mismo PAN en otros tiempos cuando era simple oposición. Como ya se dijo, para que el plan funcionara se hubo de requerir necesariamente un pequeño ejército de personas en lo que debió haber sido un auténtico operativo de estado, quizá conducido desde las entrañas de alguna dependencia pública como la Secretaría de Gobernación. En pocas palabras, lo que crearon las mentes maquiavélicas que secundan al candidato de la ultraderecha Felipe Calderón fue ni más ni menos una gran mentira con la cual se pretendió engañar al pueblo de México la misma noche del debate, una mentira de la cual tanto Josefina Vázquez Mota como Felipe Calderón ciertamente estaban al tanto, consumando con esta mentira la guerra psicológica orquestada el día del debate.

¡Y todavia así, con mentiras de este calibre, Felipe Calderón tuvo la osadía y el cinismo de estar acusando repetidamente la noche del segundo debate a López Obrador de ser un mentiroso!